-La gratitud, es un hecho que demuestra amor-.
Aquel día, el sol estaba bastante intenso. Una pequeña hormiga, estuvo a punto de desmayarse de la sed que tenía. Decidió entonces bajar hasta un tranquilo manantial, para hidratarse y reponer sus energías. Se inclinó un poco para tomar; pero, se ha caído sin pensar. La corriente comenzó a arrastrarla.
– ¡Auxilio! ¡Auxilio! ¡Que alguien me ayude! Dijo la hormiga muy asustada.
En las alturas, se encontraba una paloma observando lo que allí ocurría. Al ver a la pobre hormiguita en peligro, buscó velozmente cortar una rama con su pico; enseguida, la lanzó. Le angustiaba que la pequeña se pudiera ahogar (y una ayuda no está demás). La hormiga subió a la rama, y la usó como salvavidas hasta lograr llegar a la orilla.
Al cabo de un rato, la hormiguita escuchó a lo lejos un sonido misterioso. Se trataba de un cazador preparando su arma para disparar a la bondadosa paloma. La hormiga sin dudar, le dio un fuerte mordisco en el tobillo, y al éste gritar… alertó a la paloma para de allí emigrar. La fiel ave, miró a la hormiga con total agradecimiento, y alzó inmediatamente su vuelo hacia otro lugar.
Moraleja: Debemos ser siempre agradecidos. No solo con nuestras palabras, sino con nuestros hechos.
me justo mucho este cuento aprendi que siempre hay que ser bueno
es »FABULA»
Bien gracias los felicito
tenemos que ser recíprocos con las personas que nos rodean demostrar con palabras y acciones las cosas